Desde las intervenciones psicoterapéuticas asistidas con animales, los perros aparecen como un elemento motivacional de manera natural. Utilizamos a los animales como una herramienta para poder llegar de una manera más rápida y eficaz al usuario objeto de la terapia. Los animales son muy buenos catalizadores de emociones y sentimientos, dinamizando sin querer todo tipo de actividades pautadas por los profesionales.
Las interacciones con animales proporcionan beneficios fisiológicos, psicológicos y sociales. Estos beneficios suelen ser particularmente significativos en individuos vulnerables, como son los pacientes objeto de nuestra intervención.
Nuestra metodología está basada en el respeto entre todos los participantes del proceso terapéutico y en la detección de las necesidades individuales de nuestros usuarios, entendiéndolos siempre desde un modelo biopsicosocial. Entendemos a la persona como una suma de experiencias vividas y relaciones humanas que ha obtenido durante todo su proceso evolutivo.
En caso que sea una institución quién contrate nuestro servicio, concertamos una entrevista con el cliente para conocer al equipo de profesionales de dicha institución, sus usuarios y su metodología de trabajo. Posteriormente se llevaran a cabo las diferentes fases del proceso terapéutico, del mismo modo que realizaríamos si el cliente es el propio usuario.
FASE DE PRE-EVALUACION:
Realizamos una evaluación previa de los casos a partir de pruebas psicológicas estandarizadas (test, cuestionarios), observaciones preliminares y entrevistas con el usuario. En esta fase también tenemos en cuenta los informes de otros profesionales que estén participando en el caso, y con la información proporcionada por los usuarios/familiares/amigos en entrevistas.
Esta fase nos otorga un diagnóstico en relación con las preferencias, habilidades, competencias y necesidades de los usuarios objeto de intervención.
FASE DE DETERMINACION DE OBJETIVOS/ LA TERAPIA:
El terapeuta organizará todos los datos obtenidos de la pre-evaluación del usuario o grupo, y a partir de los mismos se determinarán los objetivos de intervención.
Posterior a ello, se explicará al cliente y/o usuario los aspectos a trabajar en su caso y qué pasos y técnicas se va a llevar a cabo en el proceso terapéutico. Al tratarse de una intervención centrada en la persona tenemos en cuenta las preferencias de orientación psicológica del cliente/paciente. No obstante siempre aconsejamos trabajar bajo una metodología basada en la ejecución de programas y terapias validadas.
FASE DE TRATAMIENTO TERAPEUTICO:
En esta fase se lleva a cabo la terapia acordada. En algunos casos, se pautan con el cliente una serie de sesiones que suelen coincidir con sesiones grupales y la ejecución de un programa determinado. En casos individuales, nos adaptamos a la evolución del usuario, y vamos distanciando las sesiones hasta que el usuario haya aprendido las técnicas y estrategias necesarias para superar y/o afrontar el problema que le afecta.
FASE DE EVALUACION:
Realizamos la post-evaluación del tratamiento terapéutico con las mismas pruebas psicológicas utilizadas en la pre-evaluación. Comprobamos que los cambios observados en los usuarios son suficientes para poder finalizar el proceso terapéutico.
FASE DE MANTENIMIENTO:
Llevamos a cabo un seguimiento del usuario por teléfono para la prevención de posibles recaídas. Con ello nos aseguramos que las mejorías experimentadas por el usuario se mantienen satisfactoriamente y que el entrenamiento de técnicas y estrategias ha sido eficaz.
